Éste pasado lunes el Real Madrid se enfrentó a los Oklahoma City Thuder en Madrid. Después de una primera parte más que dubitativa y con muchos altibajos en el juego y sobretodo en el marcador, y después de una prórroga, el equipo de Laso se alzó con la victoria por 5 puntos, 142-137.
Suponía la segunda victoria de los blancos contra un equipo NBA en su historia y nada más lejos de la realidad, un gran aluvión de alagos empezaron a aflorar en RRSS y en los distintos medios de comunicación nacionales. Sobre ello quiero reflexionar, no sobre lo que allí se pudo ver sino todos los comentarios que he podido leer y escuchar.
No me considero un experto en baloncesto pero sí es cierto que veo, leo, escucho y me informo bastante sobre este deporte. Por ello, ¿cómo que el RM puede competir en la NBA?, qué…¿cuántos partidos ganarían los de Laso en la Regular Season? ó ¿por què no una liga mundial con equipos NBA-Europa? La única cuestión que me convenció por creíble y normal y pensada en profundidad por quienes se lo preguntan fue ¿se irá por fin Llull en 2017 a la NBA?
Veamos. Un gran equipo europeo, de los más fuertes y candidatos a la Euroliga puede ganar en un partido aislado, de pretemporada para los Thunder en este caso ya que los estados de forma de ambos equipos es bastante diferente. Si a ésto le unimos que su estrella Westbrook sólo jugó 22 minutos, era algo más probable, algo sólo, que pudieran perder el partido.
El equipo de Oklahoma ha variado mucho su plantilla y es bastante peor a priori que el de la temporada pasada y también de cara a cualquier equipo que se les enfrente. Con ello quiero decir que no es lo mismo enfrentarte a los Thunder que a los Spurs.
Ni el Real Madrid ni ningún equipo ACB son aptos para competir, ni siquiera un poquito, contra equipos infintamente más fuertes físicamente y técnicamente. No me cabe la menor duda que quedarian últimos basícamente porque no aguantarían el ritmo de esa competición.
Los dos únicos puntos positivos de esta victoria para el RM son la moral que te da una victoria frente a un equipo muy superior al tuyo y por otro lado, reafirmarse una vez más delante del mundo que Sergio Llull es un jugador NBA. Fuerza, ritmo, coraje y gran elección siempre en los momentos claves, se vieron de nuevo en la pista. Acabó con 22 puntos y tres triples sobre la bocina en los finales de tres cuartos diferentes.
Este dato puede ser un arma de doble filo para el equipo entrenado por Laso ya que pese a saber con sobradas garantías que tiene un jugador TOP en su plantilla, vuelven a sonar cantos de sirena sobre su marcha a la liga americana. Si sigue a este nivel será algo común verano tras verano siempre y cuando siga competiendo con el RM o cualquier otro gran equipo europeo.
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